jueves, 31 de julio de 2008

EL MAESTRO DE ARQUERIA

El Maestro


 Después de ganar varios concursos de arquería, el joven y jactancioso campeón retó a un maestro Zen que era reconocido por su destreza como arquero. El joven demostró una notable técnica cuando le dió al ojo de un lejano toro en el primer intento, y luego partió esa flecha con el segundo tiro. "Ahí está", le dijo el viejo, "¡a ver si puedes igualar eso!". Inmutable, el maestro no desenfundó su arco, pero invitó al joven arquero a que lo siguiera hacia la montaña. Curioso sobre las intenciones del viejo, el campeón lo siguió hacia lo alto de la montaña hasta que llegaron a un profundo abismo atravesado por un frágil y tembloroso tronco. Parado con calma en el medio del inestable y ciertamente peligroso puente, el viejo eligió como blanco un lejano árbol, desenfundó su arco, y disparó un tiro limpio y directo. "Ahora es tu turno", dijo mientras se paraba graciosamente en tierra firme. Contemplando con terror el abismo aparentemente sin fondo, el joven no pudo obligarse a subir al tronco, y menos a hacer el tiro. "Tienes mucha habilidad con el arco", dijo el maestro, "pero tienes poca habilidad con la mente que te hace errar el tiro".

CUENTO ZEN



El Discípulo Frustrado  y FRACASADO




5 comentarios:

saudade dijo...

Las cosas cambian. Antes lo hubieras encontrado correcto... Ahora no, la verdad. Y mejor :).

R. dijo...

Cuántas cosas dejamos de hacer por miedo...

Ferzvladimir dijo...

miles

Ronin dijo...

Tirar un golpe cualquiera lo puede hacer, hacerlo eliminando nuestros pensamientos, nuestros miedos, nuestras limitaciones no es cualquiera, dominar la técnica es el primer paso dominar la mente es la maestría!

Ferzvladimir dijo...

asi es , no es todo el mundo tiene la suficiente capacidad para dar ese golpe de gracia, sin liberarse primero de todas las cosas que pueden haber a su alrededor; encierra muchas verdades esta historia