LA ASTUCIA

En un buen diccionario de sinónimos encontramos la equivalencia de astucia con maquiavelismo. A su vez, ese mismo diccionario hará equivaler el maquiavelismo a perfidia, doblez, intriga y, naturalmente, astucia. Sin embargo, Nicolás Maquiavelo no utilizo esta palabra sino la de prudencia, aunque con un sentido de discernimiento y precaución, de un sexto sentido de prevenir a tiempo. Todo el contexto del príncipe, mayoritariamente bélico – de conquista y conservación de los principados-, da a este término de prudencia el significado. A su vez, esta palabra es sinónimo de maniobra, artimaña y por supuesto, astucia.

La astucia expresa más apropiadamente la virtud que considero imprescindible para el líder empresarial. La prudencia sugiere cautela, más que otras significaciones como precaución o discernimiento. La astucia la entiendo con el doble sentido de análisis preventivo y capacidad estratégica. La considero como maquiavelismo global y no exclusivamente en el sentido peyorativo, aunque debo incluirlo.

Un poco después de que Maquiavelo escribiera el príncipe, el samurái, miyamoto musashi, retirado y dedicado a la contemplación, a la enseñanza y a la pintura, escribió en los últimos días de su vida (1584-1645) El libro de los cinco anillos. Una frase del mismo es su mejor presentación. Cuando has comprendido el camino del arte de la lucha, no existe una sola cosa que no seas capaz de comprender. Este camino es el arte marcial del manejo de la espada kendo y musashi afirma que el conocimiento profundo del kendo no es solo astucia y estrategia guerrera sino que adquiere la visión táctica para cada situación de la vida. Líderes empresariales japoneses leen y meditan el libro de miyamoto musashi y ponen en práctica sus enseñanzas en la gestión de sus corporaciones.

Un libro que si conoció Maquiavelo fue El arte de la guerra de sun Tzu, escrito en la época mítica de la china clásica. No se sabe quien fue sun Tzu, pero su libro, el más antiguo que se ha escrito sobre estrategia militar, está considerado como el mejor de todos. Genios militares como napoleón y Mao Tse Tung lo tenían como su libro de cabecera. Actualmente son muchos los empresarios occidentales, que estudian tácticas estratégicas en el libro de Sun Tzu, comentado por expertos en economía. Puede sorprender al más astuto de los estrategas que Sun Tzu haya propuesto hace miles de años, cinco maneras de espiar a nuestros competidores: reclutar personal del enemigo, pagar la información, introducir a alguien de nuestro bando en el campo enemigo, infiltrar en el campo enemigo falsa información, descubrir, comprar y utilizar los espías del enemigo.

Un autor anónimo recopiló 36 máximas de astucia estratégica oriental, agrupadas en seis grupos, cada uno de los cuales, responde a una situación diferente en los enfrentamientos. Representan 5,000 años de sabiduría guerrera y pueden ser una buena síntesis del maquiavelismo entendido como sabiduría y astucia para príncipes de la política y la empresa. El teórico militar Karl von Klaussewitz escribió que la guerra es la continuación de la política y esta – según yo pienso- es equiparable en su estrategia al arte del liderazgo empresarial y a cualquier liderazgo. No es la menor entre las artes estratégicas la exigida al líder empresarial sino que del él se puede decir, como Baltasar Gracián: mas se requiere hoy para un sabio, que antiguamente para siete, (en alusión a los siete sabios de Grecia)

I. EN SITUACIÓN DE SUPERIORIDAD
1. Cruzar el mar confundiendo al cielo (encubrir lo extraordinario con normalidad)
2. Sitiar el reino de Wei para salvar el reino de Zhao (ataques a las líneas más débiles)
3. Matar con un cuchillo prestado (divide y vencerás, has que el otro se haga daño)
4. Relajarse mientras el enemigo se agota (el sauce se pliega al viento)
5. Saquear una casa en llamas (Aprovechar los problemas y desgracias del competidor)
6. Fingir ir hacia el este mientras se ataca por el oeste (despiste)

II CONFRONTACIÓN CON FUERZAS SIMILARES
1. Crear algo a partir de la nada( según el tao, el universo se creó de la nada)
2. Aparentar tomar una decisión cuando se ha decidido algo muy diferente (desinformación)
3. Observar los fuegos que arden al otro lado del rio (que los otros se peleen entre sí )
4. Ocultar la daga tras una sonrisa (la bondad es el mejor camuflaje de la malicia)
5. Sacrificar el ciruelo por el melocotonero (perder una batalla para ganar la guerra)
6. Aprovechar la oportunidad para robar una cabra ( sacar pequeñas ventajas)

III ESTRATEGIAS DE ATAQUE
1. Golpear la hierba, para asustar a la serpiente (la provocación y el ruido ayudan)
2. Levantar un cadáver de entre los muertos (utilizar lo que todos han olvidado)
3. Atraer al tigre fuera del ramaje (atraer al enemigo al terreno más conveniente)
4. Deshacerse del enemigo permitiéndole escapar (al que huye, puente de plata)
5. Fabricar un ladrillo para obtener jade (algo sin valor puede darnos un gran fruto)
6. Capturar al cabecilla para prender a los bandidos (muerto el perro se acaba la rabia)

IV EN SITUACIONES DE CONFUSIÓN Y DE CRISIS
1. Robar La leña debajo de la cardera (atacar la raíz, debilitar la moral del enemigo)
2. Pescar en aguas turbias (el ideograma chino para crisis es peligro mas oportunidad
3. Desprenderse del caparazón de cigarra (equivale al arte del camuflaje)
4. Cerrar la puerta para atrapar al ladrón (hasta el león es débil dentro de un trampa)
5. Aliarse con un enemigo lejano para vencer al enemigo cercano
6. Conseguir un camino seguro para el reino de Guo (conseguir paso para avanzar)

V GANAR TERRENO
1. Remplazar sus vigas con madera podrida (debilitamiento y sabotaje)
2. Mata al pollo para asustar al mono (mostrar que se está dispuesto a todo
3. Hacerse el tonto sin dejar de ser listo (la sabiduría no necesita de ingeniosidad)
4. Retirar la escalera después de haber subido por ella (quemar las naves)
5. Adornar los arboles con flores (no es oro todo lo que reluce, pero puede parecerlo)
6. Hacer que el anfitrión y el invitado intercambien sus sitios (el nido del cuco es ajeno)

VI SITUACIONES DESESPERADAS
1. Utilizar una mujer para engañar a un hombre (dos tetas tiran más que dos carretas)
2. Abrir de par en par las puertas de la ciudad (la mejor mentira puede ser la verdad)
3. Hacer que el espía siembre confusión en su propio bando.
4. Hacerse daño así mismo (el que sufre calamidades provoca simpatías)
5. Encadenar entre si a los barcos enemigos (dos saltamontes atados no pueden saltar)
6. Retirarse (apartarse cuando todo falla si hay garantía de poder volver a luchar)

Jose Luis Sanchis